Covey Alquiler
El leasing y el Renting son las dos formas más populares de financiamiento de vehículos para empresas y particulares. Aunque ambas opciones tienen sus similitudes, existen algunas diferencias importantes que los clientes deben tener en cuenta antes de tomar una decisión.
Empecemos por el principio.
El Renting, también conocido como arrendamiento operativo, es una forma de financiamiento en la que el cliente alquila un vehículo a una empresa de Renting, como Covey, por un período de tiempo determinado (lo más frecuente es de 6 meses a 3 años) a cambio de pagos mensuales. En el Renting el cliente no tiene la opción de comprar el vehículo al final del contrato y debe devolverlo a la empresa de Renting.
En esta modalidad de contrato, la empresa de Renting es responsable del mantenimiento y las reparaciones del vehículo durante el período del contrato. Además, el Renting puede incluir servicios adicionales, como seguro y asistencia en carretera.
Ventajas del Renting:
- Los costos a largo plazo son predecibles y fáciles de planificar.
- El Renting puede ser una opción atractiva para las empresas, ya que los pagos mensuales pueden ser deducibles de impuestos.
- Los servicios adicionales pueden estar incluidos en el contrato de Renting.
- Los gastos de mantenimiento, seguro o ITV entre otros, son responsabilidad del arrendador, no del cliente.
- Renovación más periódica de los vehículos. En los contratos de Renting los contratos suelen ser más cortos que los del leasing, por lo que se puede renovar el vehículo más frecuentemente.
- La mayoría de los Renting no tienen pago inicial ni depósito de garantía, lo que los hace más asequibles para todos los usuarios.
Desventajas del Renting:
- El cliente no tiene la opción de comprar el bien al final del contrato.
- Los pagos mensuales pueden ser más altos que los de un préstamo tradicional, al incluir más prestaciones en el precio.
- A diferencia de los préstamos convencionales, el Renting no tiene intereses.
- El cliente está limitado por las restricciones del contrato de Renting, lo que puede limitar su flexibilidad y capacidad para personalizar o modificar el bien. Salvo en casos de Renting más personalizables como en el caso de nuestro Renting Fidelity Plus que posee más opciones de personalización del vehículo por parte del cliente.
El leasing es una forma de financiamiento en la que el cliente alquila un vehículo a una empresa de leasing por un período de tiempo determinado (por lo general de 2 a 5 años) a cambio de pagos mensuales.
En esta modalidad de contrato el cliente tiene la opción de comprar el vehículo al final del contrato, generalmente por un precio preestablecido.
A diferencia de como vimos antes en el Renting, en un contrato de leasing el cliente es responsable del mantenimiento y las reparaciones del vehículo durante el período del contrato. Además, al final del contrato, salvo que se decida comprar el vehículo en propiedad, el vehículo debe ser devuelto a la empresa de leasing, perdiendo el beneficio de los mantenimientos pagados.
Ventajas del leasing:
- Los pagos mensuales son generalmente más bajos que los de un préstamo tradicional.
- El cliente puede obtener un vehículo de alta calidad cada pocos años.
- El arrendamiento puede ser una opción atractiva para las empresas, ya que los pagos mensuales pueden ser deducibles de impuestos.
Desventajas del leasing:
- Al final del contrato, el cliente no posee el bien, a menos que decida acometer su compra por el importe pactado que resulte pendiente.
- Los costos a largo plazo pueden ser mayores que con la compra.
- El cliente está limitado por las restricciones del contrato de leasing, lo que puede limitar su flexibilidad y capacidad para personalizar o modificar el bien.
- De media, los seguros suelen ser más caros para los vehículos de leasing.
- En caso de que decidas no acometer la compra al final del contrato pueden existir penalizaciones por un desgaste excesivo o por exceso de kilometraje.
La principal diferencia entre el Leasing y el Renting es la propiedad del vehículo. En un contrato de leasing, el cliente tiene la opción de comprar el bien al final del contrato, mientras que en un contrato de Renting, el cliente no tiene esa opción y debe devolver el vehículo al final del contrato.
Otra diferencia importante es la responsabilidad por el mantenimiento y las reparaciones del vehículo. En un contrato de leasing, el cliente es responsable del mantenimiento y las reparaciones durante el período del contrato. Esto significa que el cliente debe asegurarse de que el vehículo se mantenga en buen estado y que cualquier reparación necesaria se realice de manera oportuna.
Por otro lado, en un contrato de Renting, el proveedor del servicio es responsable del mantenimiento y las reparaciones del vehículo. Esto significa que, en el Renting de furgonetas o coches el cliente no tiene que preocuparse por el mantenimiento y las reparaciones, lo cual puede ser una gran ventaja en términos de costes y conveniencia.
Otra diferencia clave entre leasing y Renting es el plazo del contrato. En general, los contratos de leasing son a largo plazo, con una duración media de 2 a 5 años. Por otro lado, los contratos de Renting son a corto plazo, con una duración típica de 6 meses a tres años.
En cuanto a los costes, un contrato de leasing puede resultar más económico en términos de pago mensual, ya que el cliente está pagando por el uso del vehículo en lugar de su compra, y está teniendo que pagar los mantenimientos que vayan surgiendo de su propio bolsillo.
Sin embargo, al final del contrato, el cliente no es propietario del vehículo y no tiene derecho directo a la propiedad, a menos que pague el precio pactado inicialmente por el vehículo. Por otro lado, en un contrato de Renting, el cliente no es propietario del vehículo en ningún momento, pero tiene la opción de renovar el contrato al final del período.
En términos generales, el leasing puede ser una buena opción si te planteas la posibilidad de comprar el vehículo transcurrido el plazo del contrato y de este modo recuperar parte de la inversión, tanto sea quedándotelo en propiedad, como vendiéndolo, mientras que el Renting es una mejor opción si deseas disponer de un vehículo moderno, con las últimas prestaciones del mercado, sin tener que preocuparte por mantenimientos ni por cuotas finales. Siempre tendrás el vehículo que desees a tu alcance, con cuotas fijas, y sin preocupaciones por averías, mantenimientos ni seguros obligatorios.
Sí, en algunos casos se puede comprar el vehículo al final del contrato de leasing por un precio que generalmente está pactado al principio de la relación contractual. Esto se conoce como opción de compra residual.
No, no es posible comprar el vehículo al final del contrato de Renting, ya que el vehículo es propiedad de la empresa que proporciona el servicio de Renting.
En general, los contratos de leasing y Renting tienen una penalización por cancelación anticipada si el cliente desea devolver el vehículo antes del final del contrato.
No, el desgaste normal del vehículo está incluido en el contrato de Renting y no debería ser motivo de preocupación. Sin embargo, pueden existir penalizaciones en caso de un desgaste excesivo, o daños adicionales al final del contrato.
En un contrato de leasing, se espera que el cliente pague una tasa de interés que refleja el costo del financiamiento del vehículo durante el plazo del contrato. Además, se pueden aplicar otros cargos; como cargos por uso excesivo o desgaste. En general, el costo total del contrato de leasing es mayor que el costo del contrato de Renting. En un contrato de Renting, el cliente paga una tarifa mensual que cubre el uso del vehículo durante el plazo del contrato. En Rentings como el de Covey, esta tarifa mensual incluye los costos de mantenimiento y reparación.
Haciendo cuentas, el coste total del contrato de Renting puede ser menor que el costo del contrato de leasing, garantizando una mayor tranquilidad para el cliente.
En un contrato de "leasing", la persona o empresa que alquila el vehículo es responsable de pagar el impuesto de matriculación. Esto se debe a que el arrendatario es considerado el titular del vehículo durante el período del contrato de "leasing" aunque el vehículo está registrado a nombre de la empresa proveedora.
El tipo de interés en un contrato de "leasing" puede variar dependiendo del proveedor de "leasing" y de las condiciones específicas del contrato. Sin embargo, por lo general el tipo de interés en un contrato de "leasing" suele ser más alto que el de la financiación bancaria, oscilando entre el 11% y el 13% TAE. ¿Cuál es mejor para mi negocio, el Renting o el Leasing? La elección entre leasing y Renting dependerá de las necesidades específicas de tu negocio. Si tu empresa necesita vehículos de alta gama o especializados y desea mantener una flota actualizada, el Renting es la opción que puede resultar más atractiva. Además, si tu empresa no tiene el capital inicial para comprar equipos o vehículos de inmediato, el Renting nuevamente puede ser la mejor opción, pues suelen tener cuotas iniciales bajas.
Por otro lado, si deseas adquirir el vehículo al final del contrato o si tu empresa necesita deducir los gastos financieros en tus impuestos, el leasing puede ofrecer una mejor opción en términos de contabilidad.
En resumen, tanto el leasing como el Renting son opciones viables para las empresas que buscan adquirir vehículos sin la necesidad directa de comprarlos. La elección entre leasing y Renting dependerá de las necesidades específicas de tu empresa, incluidos los costos, la flexibilidad y la propiedad al final del contrato. Asegúrate de evaluar cuidadosamente los pros y los contras de cada opción antes de tomar una decisión. Si crees que la decisión que más se ajusta a tus necesidades o a las de tu negocio es el Renting, puedes ponerte en contacto con nosotros y uno de nuestros asesores especializados que te asesorarán y orientarán durante todo el proceso de elección de vehículo, así como de modelo de Renting que más encaje con tus necesidades para garantizar que nunca pagues por más de lo que necesites.
